George Best, nacido en Belfast en 1946, fue uno de los primeros grandes íconos del fútbol moderno. Conocido por su increíble talento y estilo de vida extravagante, Best fue la estrella del Manchester United en los años 60, ganando la Copa de Europa en 1968 y el Balón de Oro ese mismo año. A pesar de su corta carrera, Best dejó un legado como uno de los jugadores más talentosos y carismáticos de la historia.